Bismillahi
Rahmani Rahim
Hz.
Yafar as-Sadiq (ra) fue el hijo del Imam Muhammad al-Baqir (ra), hijo del Imam
Zain al-Abidin (ra), hijo de Hz. Husayn (ra), hijo de Hz. Ali ibn Abi Talib
(ra). Su madre era hija de al-Qassim, cuyo bisabuelo fue Sayidina Abu Bakr
Siddiq (ra).
Recibió
del Mensajero de Allah (asws) dos líneas en la herencia del conocimiento
sagrado: a través de Hz. Ali y a través de Sayidina Abu Bakr. Por esto se le
llamó "Heredero de la estación profética y Heredero de la estación
veraz".
Fue
el quinto Grandsheykh de la Silsila Naqshbandiyya, recibiendo el secreto de la
luz muhammadí desde su abuelo Hz. Qassim ibn Muhammad ibn Abu Bakr.
Compartimos
algunos de sus sabios dichos:
*El temor y la ansiedad son
como guardianes establecidos sobre el corazón del hombre, mientras que la
esperanza es un intercesor de parte del nafs y sus necesidades. Aquellos que
conocen a Allah anhelan Su misericordia mientras Le temen. La esperanza y el
temor son como las dos alas de la fe, y sólo los creyentes que poseen ambas
alas pueden volar hacia la estación de la Complacencia de Allah. Con el ojo del
intelecto ellos observan (comprenden) las exhortaciones y amenazas de Allah. El
temor de Allah orienta su atención hacia la Justicia divina y les impide
ensuciarse con la falta. La esperanza en Allah los convoca a recibir Su
Misericordia y Generosidad. En suma, la esperanza mantiene vivo el corazón,
mientras que el temor suprime las inclinaciones sheytánicas.
*La conciencia de la muerte
aparta del alma del hombre toda lujuria y pasiones ilícitas; corta las raíces
de la negligencia y el descuido; fortalece la esperanza del corazón en el
cumplimiento de las promesas divinas; suaviza y atempera el carácter; dispersa
los signos de la idolatría; ahoga el fuego de la codicia; y le muestra al
hombre la pequeñez e insignificancia del mundo. Esto es lo que implica el hadiz
del Mensajero de Allah (asws): 'Una hora
de reflexión vale más que un año de devoción'.
*Quien conoce que Allah ve y
escucha sus palabras y está bien al tanto de sus actos, tanto buenos como malos,
se refrena, por este conocimiento y por la fe en la cual reposa, de todo tipo
de faltas. Tal persona temerá a su Señor y rechazará seguir las inclinaciones
de la pasión.
*Respecto a la expresión
coránica: "...para probar cuál de
vosotros es el de mejor obrar" (67:2), Hz. Yafar (ra) dijo: "No
se refiere aquí a la cantidad de las acciones sino al más alto grado de
rectitud. La rectitud consiste en el temor de Allah, la sinceridad de intención
y la pureza de acción. Mantener a un acto completamente sincero y libre de toda
contaminación es más difícil que realizar el acto mismo. Una acción sincera es
aquella en la que se procura solamente la complacencia de Allah y no la
alabanza de algún otro. La intención es mejor que la acción, o es incluso
idéntica a ella, ya que "cada uno
actúa a su manera" (17:84), lo que significa: según su intención.
*La vida del hombre no es más
que un instante. Lo que se llama pasado, ya no existe, y no sentís su placer o
su dolor. En cuanto a lo que ha de venir, no lo conocéis. El capital verdadero
y precioso de vuestra vida son pues esos breves instantes de que ahora
disfrutáis. Ocupaos pues ahora de domeñar vuestra alma, y esforzaos en
redimiros y obtener la salvación; sed firmes y perseverantes en el rigor de la
adoración a Allah y la obediencia a Sus Mandatos; y preservaos de la suciedad
de la falta y la desobediencia a Allah.
*Refrena tu ego de lo que te
daña antes de que la muerte te sorprenda. Esfuérzate por mantener libre a tu
alma de la misma forma que te empeñas en obtener el sustento. Porque tu alma es
rehén de tus actos, y sólo tu esfuerzo puede liberarla.
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