Bismillahi Rahmani Rahim
Todo lo que haces en
este mundo cuenta, sea bueno o malo. Todo cuenta de acuerdo a tus intenciones.
Observa tus intenciones. Puedes engañar al mundo, ¿también te vas a engañar a
ti mismo? Observa tu intención. ¿Cuál es tu intención cuando haces las cosas,
mientras estás haciendo las cosas? Si es otra cosa más que la causa de Allah,
has fallado. Todo lo que es un velo entre tú y Allah, es dunya. Para ti, ese es
el amor de este dunya.
'¿Por qué dije esto?
¿Dónde llegó esta palabra? ¿A quién perjudicó y a quién ayudó?'. Te tienes que
fijar en eso. No solamente decir: 'Oh, tan solo sucedió. ¿Qué puedo hacer?'. La
gente del siglo 21 dice: '¿Qué puedo hacer? Tan solo sucedió'. Podrías haber
hecho tantas cosas para que eso no sucediera. Luego de suceder, también puedes
hacer muchas cosas para corregirlo, por supuesto. Pero si sólo dices:
'Bueno...', tantos dicen: 'No me importa'. Uff! Ahora estás en problemas. No
interesa quién eres y qué eres. Tienes que fijarte qué sale de tu boca. Luego
dices: 'Lo siento. Te pido disculpas'. Para eso está garantizado que te vas a
disculpar. Pero con esas disculpas te serán quitadas tantas cosas, ya que el
bendito Profeta (asws) dice: 'No hagas nada de lo que luego necesites
disculparte'. Porque el Mu'min, el creyente, es una persona sabia que sabe
dónde llegará la palabra. Si no lo sabe, su nivel de Mu'min está descendiendo.
Para Allah-swt- no hay
nada demasiado grande ni nada demasiado pequeño. Como Él puede crear el ala de
un mosquito, instantáneamente Él puede crear miles de millones de mundos como
este con miles de millones de personas en ellos. Para Allah no es grande ni
pequeño. Es grande o pequeño para ti. Pero no lo es para Allah. Así que ahora,
de acuerdo a tu nivel, tienes que actuar y tienes que observar. Si piensas que
para ti es algo grande, tienes que fijarte qué sale de tu boca.
El bendito Profeta
(asws) dice: 'El hombre va a sufrir en el mundo próximo por dos partes de su
cuerpo'. Estas dos partes están trayendo el desastre a la humanidad. Dijo: 'Dos
partes. Una es su lengua y la otra su parte privada'. Tu parte privada, para
qué la usas, cuándo la usas y por qué la usas. Tu lengua, cuándo la usas y para
qué la usas. ¿Qué dice el Profeta (asws)? 'Habla lo que será de beneficio para
ti y los demás o permanece en silencio'. El silencio te es una protección. Eres
responsable de lo que sale de tu lengua. De lo que está adentro, no eres
responsable. Lo que sale de tu lengua puede dar algunas cosas buenas a la gente
y la gente lo disfruta. Vas a obtener la recompensa por eso. Lo que sale de tu
boca ha causado confusión; vas a pagar el precio por eso. No puedes decir:
'Bueno, ya lo hice. ¿Qué puedo hacer? Lo siento'. Por supuesto que lo sientes.
Lo vas a lamentar. Si no lo lamentas ahora, lo vas a lamentar luego. Esto es
porque no se te ha dado la lengua para que digas lo que quieras cuando quieras.
La gente del siglo 21 está destruyendo todo lo que ha construido. Por eso es
que el bendito Profeta (asws) dice: 'Se levantarán a la mañana como creyentes.
A la noche irán a la cama como incrédulos. Irán a la cama como creyentes y se
levantarán como incrédulos'.
La fe y la falsedad, la
mentira, no pueden estar en el mismo corazón. Si estás mintiendo... La mentira
ahora tiene tantas categorías. Si empiezas a hablar acerca de la mentira,
entonces, ohh... Pretender algo que no tienes es mentir, engañar a los demás.
No pueden estar en el mismo corazón, lo dice el bendito Profeta (asws).
Imposible. Si la mentira está allí, entonces la fe sale afuera. Si la fe está
allí, entonces la mentira no puede ingresar. No puedes mentir. Mentira no es
decir a un hijo: 'Hey, ven aquí. Quédate quieto. Te voy a dar algo'. Eso es
otra cosa. Eso es entrenamiento. Entrenamiento es una cosa, mentir es otra. La
gente del siglo 21 también es especialista en eso: se están mintiendo a sí
mismos. Le están mintiendo al mundo y se están mintiendo a sí mismos.
La gente de hoy en día
no tiene paz en el mundo. Están sufriendo. La razón mayor es que no están
compartiendo. La paz y todas las bendiciones llegan a un hombre mientras está
dando, compartiendo con los demás. Y Allah está complacido contigo. Cuando
Allah está complacido contigo, ¿qué más quieres? Pero primero tienes que
entender qué es Allah. Las personas solo están mencionando el nombre las 24 hs,
pero no están intentando entender qué es Allah y qué es ser un siervo. Una vez
que sabes, que llegas a darte cuenta de que eres un siervo, te llegan todas las
bendiciones y corres para hacer el servicio de la mejor manera.
Has cortado la conexión
entre tú y tu Señor. Si la electricidad no llega aquí, puedes tener bellas
lámparas pero no te van a servir de mucho. Tiene que entrar la electricidad
para dar luz, Nur, a esta habitación. Una vez que te desconectas de aquellas
estaciones celestiales, no vas a obtener los beneficios de las cosas que te
rodean. Y debido a que no estás obteniendo el beneficio, no estás reconociendo
su valor.
Las personas no
comprenden el valor de lo que tienen en sus manos. Habitualmente las personas
lo comprenden cuando lo pierden. Cuando lo tienen no lo comprenden. Ese es otro
secreto que tienes que conocer: qué tipo de valor se te ha puesto en las manos,
y apreciarlo, y ser agradecido por eso, ya que, ¿quién dice que tú puedes
tenerlo y el que está al otro lado del mundo no puede tenerlo? ¿Cuál es la
diferencia entre tú y ese? El mismo Creador te ha creado a ti y a ese. Él te lo
ha dado a ti y no está en la mano de ese otro. ¿Y qué estás haciendo al
respecto? Tal vez no puedas llegar allí, sí. Pero al menos puedes ser un siervo
agradecido. Y Allah ordena mediante esa generosidad llegar a los demás. No
interesa lo que tienes. Si ellos están en necesidad de algo y tú sabes que
puedes hacerlo, debes correr para hacerlo. Así es que la avaricia es lo peor
que un hombre puede hacer. ¿A quién? A sí mismo.
Allah está observando a
Sus siervos. Tantas veces los siervos están gritando y llorando porque están en
problemas y están en necesidad de cosas que no están sucediendo. Y algunas
pruebas les llegan y Allah está probando sus paciencias. Es fácil abrirlo todo
para ti. Pero Él te está probando para ver qué harás. Y tantas veces, incluso
aún cuando no están pasando la prueba, la generosidad de Allah-swt- se abre más
para ellos y están alcanzando las cosas que estaban buscando y por las que
corrían. Entonces los vemos, en cuanto alcanzan esas cosas se vuelven más
salvajes, se alejan más de Allah y Su servicio. ¿Entonces piensas que Allah
está satisfecho contigo?
Tienes que pensar. Él
nos dice: 'Si Allah-swt- le hubiese dado valor a este mundo tanto como el valor
que le ha dado al ala de un mosquito, no habría dejado que los incrédulos
bebiesen una gota de agua de él'. Pero Él dice que este mundo y todo lo que hay
en él no tienen valor en la Presencia Divina y que toda clase de placer, que
piensas que es placer, tampoco tiene valor porque solamente es temporal. Todo
lo que sea temporal no tiene placer. Busca la vida eterna e intenta atraparla
mientras estás viviendo en este dunya. Y si no eres capaz de atraparla en este
dunya, entonces hay un gran signo de interrogación de si vas a ser capaz de
alcanzarla o no.
Tantos están diciendo:
'El Paraíso es tan grande. ¿Qué va a suceder? ¿Todos van a ir al infierno?'.
No. Cada uno marchará hacia lo que se ha construido a sí mismo. Pero si el
mundo entero ha perdido la dirección, no modifica nada de lo que Allah es en Sí
mismo.
La humanidad es necia,
está dormida, corriendo aquí y corriendo allí, corriendo a descubrir el mundo.
Corriendo a descubrir el mosquito, corriendo a descubrirlo todo en el Discovery
Channel, ¿huh? Están corriendo para descubrirlo todo, pero nunca he visto un programa
en el Discovery Channel que trate sobre el hombre descubriéndose a sí mismo.
¿Has visto algún programa así? "El Hombre está intentando descubrirse a Sí
Mismo: Quién es".
¿Tienes una escuela?
Todos dicen: 'Estudia'. ¿Y? 'Obtiene un diploma'. ¿Y? ¿Y? ¿Has descubierto
quién eres? ¿Has comprendido quién eres? ¿Cuán pequeño eres? ¿Lo has
comprendido? ¿Y a esa pequeña criatura cuánto poder y autoridad le ha dado el
Señor de los Cielos diciéndole: 'Te He hecho mi Califa, mi Embajador, mi
Representante sobre la faz de la tierra'? ¿Y: 'Las puertas de los cielos
permanecerán cerradas para ti hasta que te vuelvas Mi siervo, y cuando te
acepte como a un buen siervo, también te estaré abriendo las puertas de los
cielos; llegarás a cualquier lado'?
El bendito Profeta
(asws) nos dice: 'De la manera que crees es como vivirás. De la manera que
vives es como morirás. De la manera en que mueras serás enterrado. De la manera
que seas enterrado serás levantado para el Día del Juicio'. Obsérvate a ti
mismo, mírate a ti mismo, dite a ti mismo: '¿Soy feliz con la situación en la
que estoy viviendo justo ahora? ¿Me es suficiente levantarme así en el Día del
Juicio?'. Pregúntatelo. No te mientas. No te engañes. Puedes engañar al mundo
entero, la gente de hoy en día le está mintiendo a todo el mundo, izquierda y
derecha. Al menos no te mientas a ti mismo. Mírate a ti mismo, mira tus
acciones, y di: ¿te gustan? Si te gustan y dices que son de acuerdo a la línea
del Islam, entonces continúa así ya que así es como vas a morir. Si no te
gustan, entonces corrígete. No lo dejes para mañana porque Azrail tal vez esté
esperando por esta noche. Tal vez tu nombre está en ese libro.
Pero los Musulmanes
también han olvidado eso. No quieren recordar y no quieren ser recordados sobre
la muerte. Y Allah nos recuerda, Su Profeta (asws) nos recuerda, diciéndonos: 'Mantenlo
con vida, mantente vivo con ese recuerdo. De lo contrario te olvidarás de
Ajirat, caerás en los caminos incorrectos de dunya y estarás en problemas'.
Luego no podrás salir de ese embrollo.
Así que del modo que
creemos es el modo en que debemos morir. Esa es la manera en que nos debemos
esforzar. Esa es la manera en que nos debemos preparar para decir: 'Azrail me
puede llegar hoy día. ¿Qué he hecho hoy? ¿Cómo he vivido hoy día?'. Deja el
ayer. Ayer viviste bien, pero eso fue ayer. ¿Qué estás haciendo hoy día? Tanta
gente vive con la Shahadat, sus vidas están en el camino del Islam. Pero en los
últimos momentos de sus vidas llega Sheytán. Y si la perdiste, has perdido. Por
lo tanto, tienes que mantenerla con vida todo el tiempo. Una preocupación
tienes que tener, y esa es la preocupación. A cada momento tienes que chequear:
'¿Cuál es el nivel de mi fe? ¿Cómo está mi Iman? Voy a chequearlo'. Tienes un
probador para todo. ¿Dónde está el probador para chequear tu fe? Verifícalo
para ver en qué nivel está. ¿Está pasando o está cayendo? Si está cayendo, no
duermas, ni siquiera comas, corre para componerlo y llevarlo al nivel en que
pase porque Azrail está soplando en tu cuello las veinticuatro horas del día.
Puede aparecer frente a ti. Piénsalo, piensa.
Hz Sheykh Abdul Kerim
Effendi (qs).