Bismillahi Rahmani Rahim
¿Qué sucedería si el Califato
Sunni del Imperio Otomano aún existiera y Makkah y Medina aún estuviesen bajo
su control?
No habría habido destrucción de
los lugares sagrados en nombre de la construcción.
No habría habido destrucción de
las tumbas de los benditos compañeros y miembros de la familia del bendito
Profeta (asws) en el Jannatul Baqi y en el Jannatul Mualla.
No habría habido tanta
comercialización en el nombre del Hajj y la sombra de la torre de Makkah no
habría caído sobre la Kaabatullah.
El Wahhabismo no se habría
difundido con la ayuda de los petro-dólares, la comunidad Musulmana no se
habría dividido, ni radicalizado. Los países musulmanes estarían libres del
‘Falso Yihad’.
Se podría viajar a salvo por
los países musulmanes y ellos serían prósperos y desarrollados.
La imagen del Islam no habría
sido destrozada y la gente no pensaría que el Islam enseña extremismo y
terrorismo.
No habría una desviada mutawwa
acusando a los Haajis de shirk y biddat en toda cosa secundaria y siendo
molestos con ellos.
Los gobernantes no habrían sido
borrachos, ni adúlteros, ni marionetas sionistas de EEUU. Y si los Otomanos
hubiesen estado en el poder, ellos no habrían combatido por Palestina.
A todos los Hajjis se les habría
dado el derecho de mostrar respeto a todos los Sahaba y a recitar Salat o Salam
al Nabi-e Karim (asws).
La Masjid an-Nabawi habría
estado llena de gente recitando Durud para el Nabi-e Karim (asws).
Habría cuatro Imams para Makkah
y Madinah: Hanafi, Shafi’i, Maliki, Hanbali.
No habría habido Jahallat
como lo sugieren algunos Wahhabis, cada
cosa sería acorde a la Shari’a y a la gente se le habría enseñado las etiquetas
adecuadas de Ziyarat.
La tumba de la madre del
Profeta no habría sido incendiada ni se habrían construido inodoros sobre la
casa de Bibi Jadiya en Makkah.
Los sultanes Otomanos siempre
se levantaron por la comunidad musulmana y siempre combatieron contra la opresión
hacia los musulmanes.
Y si existieran los Otomanos,
ellos habrían combatido contra el ISIS, al-Qaeda, Taliban, etc, quienes han
debilitado a los países musulmanes, contrariamente a los Saudíes que apoyan
todas esas ideologías.
La gente habría estado llena de
amor y adab por Rasulullah (asws) en vez de estar llenos de ambición por el
Jannah y miedo al infierno.
Los nombres de los Julafa
e-Rashidin habrían estado en la Kiswa de la Kaaba en vez del nombre de un
borracho perteneciente a la familia Saudita.
A la gente de otras sectas y
religiones no se las habría despojado de sus derechos. Sus derechos habrían
sido concedidos según las enseñanzas de Rasulullah (asws).
Olvídate de ayudar a EEUU a
bombardear Iraq en 1992; los Otomanos habrían unificado a los musulmanes del
mundo en vez de hacerlos combatir los unos a los otros por amor al poder y el
dominio.
Que Allah-swt- eleve la
estación de nuestros nobles antepasados Otomanos y devuelva su gloria para el
bienestar y la salvaguarda de la Ummah entera.